Quizá el elemento que mejor defina la cultura asturiana en cuanto síntesis de aspectos ecológicos, tecnoeconómicos, sociológicos e ideológicos, sea la casa tradicional. Pero decir casa en la Asturias tradicional es referirse no sólo al espacio destinado a vivienda, sino a la casería, una herramienta de producción, la unidad de explotación agropecuaria. El elemento central de la casería está constituido por la vivienda familiar, que adoptará diferentes soluciones formales a lo largo del territorio asturiano dependiendo de factores de tipo ambiental (geología, altitud, orientación y topografía de los asentamientos), cronológicos, tradición cultural y capacidad económica de sus moradores (factor este último que incidirá de manera fundamental en el diseño y magnitud de las construcciones y en la incorporación de elementos de estilo al medio rural). La interacción de estos factores da como resultado una rica tipología que va, desde la arcaica casa redonda donde en un mismo espacio conviven personas y ganado -uno de los hábitats más antiguos de Europa que tiene su origen en las características viviendas de planta curvilínea de los castros de la Edad del Hierro- y sus evoluciones ulteriores, hasta las casas de corredor entre muros, trasunto de modelos urbanos documentados en las ciudades y polas asturianas de los sigos XV y XVI, o las casonas de influencia barroca, propia de campesinos acomodados. Esta compleja evolución puede recorrerse paso a paso a través de los elementos arquitectónicos que aún perviven en Asturias; para los tipos más elementales lo explicita Mark Gimson, arquitecto inglés, que lo estudiaría en 1978 :
"En el lugar de La Braña, cercano a Cangas del
Narcea, encontré y medí una casa que es el rnejor ejemplo
que vi de una versión rectangular de la palloza (casa de planta curvilínea
y cubierta vegetal). EI descubrimiento de estas casas tiene gran importancia
para los estudios celtas en Gran Bretaña e Irlanda, pues constituyen
un anillo qúe faltaba en la evolución de las construcciones
vernáculas. Los arqueólogos en Gran Bretaña excavaron
casas redondas en los hill forts (colinas fortificadas), muy semejantes
a los castros del noroeste de España y a las citanias de portugal.
Una de las casas-tipo característica dentro de los limites celtas
es la long-house (casa larga). Son casas de planta baja, en las que los
animales ocupan una mitad y las personas la otra, existiendo también
por lo general un pajar, y con el hogar en el medio. No obstante, hasta
ahora no fue posible mostrar si existía relación entre las
casas de los hill-forts y las long-houses. La verosimilitud de tal evolución
se ve en la existencia en el noroeste de España no sólo de
castros y casas semejantes a las long-houses, sino también de las
más de sus etapas intermedias"
(Mark Gimson,1983).