La
Lengua Asturiana A través de la toponimia, de las fuentes escritas de la Antigüedad Clásica y del propio substrato lingüístico, sabemos que en Asturias se hablaba en la época de la Edad del Bronce una lengua o lenguas emparentadas, probablemente, con el actual euskera, fenómeno que parece fue común a toda la costa cantábrica, y de origen preindoeuropeo. Con la invasión de la Península por pueblos indoeuropeos aquellas quedan desplazadas por otras que, al aproximarnos a la hidronimia, la oronimia o la antroponimia, revelan una profunda celtización del País: el mejor ejemplo es el nombre de una de las principales tribus de los ástures, los luggones, cuyo radical Lug es el teónimo de la más importante de las divinidades célticas. Después de la conquista romana, a partir del año 19 B.P., comienza un proceso de extinción de las lenguas prerromanas que van perdiendo fuerza en favor de la lengua de los invasores: el Latín. Sin embargo, fueron aprendiendo esa nueva lengua que se les imponía desde sus propios sistemas lingüísticos y dejando un substrato prerromano tanto en el vocabulario como en sus hábitos articulatorios, lo que dará lugar al surgimiento del asturiano como lengua romance, que va a asentarse de hecho como lengua nacional en el Reino Asturiano (718-910). Sin embargo, en esa época se sigue usando el latín como lengua escrita en toda la Península y no será hasta los siglo: XII-XIII cuando comiencen a escribirse textos en lenguas romance, y para entonces Asturias ya estaba bastante marginada política, económica, social y culturalmente paralelamente al surgimiento de un nuevo poder: el castellano. La lengua asturiana (aún presente en las escrituras públicas, donaciones, etc. de los siglc XIII y XIV) no va desaparecer, manteniéndose solidamente entre las clases populares, y aun ent los notables del País que usan el asturiano en si obras literarias: Antón de Marirreguera (s.XVI Xosefa Xovellanos y Antonio Balvidares (s.XVI y toda una larga lista en el s.XIX y primera mitad del s.XX : Xuan María Acebal, Caveda y Nava, Teodoro Cuesta, Pepín de Pría, Fernán Coronas, etc. Tras de la larga noche de la Dictadura, en comienzos de los años 70 se produce un auténtico estallido reivindicativo y defensor de la lengua asturiana al que se sumó un verdadero "boom' literario, conocido como Resurdimientu. Con la creación por el Conseyu de Gobieno d'Asturies de I'Academia de la Llingua Asturiana en 1981, se da principio a un trabajo normativo con el que el idioma asturiano comienza a enfrentarse al futuro. Mientras tanto, en la calle y en las instituciones, el movimiento cívico reivindicativo sigue proclamando el reconocimiento de un derecho básico: la Oficialidad. |
|||